Comisión Episcopal sobre Drogadependencia - Padre Jorge García Cuerva - Argentina

sábado 3 de julio de 2010
DROGADEPENDENCIA

El padre Jorge García Cuerva está a cargo de la parroquia Santa Clara de Asís, en El Talar, de Tigre. Coordina la Pastoral Carcelaria en la diócesis de San Isidro y es miembro de la Comisión Episcopal sobre Drogadependencia.

En este reportaje el padre Jorge –tal como lo conocen en el barrio- resume la situación con la droga en la zona norte, y opina sobre el papel de los vecinos, el municipio y la comunidad en general, con los adictos y las iniciativas para encarar la problemática.
El último sábado, el padre encabezó el acto en adhesión al día internacional de lucha contra el uso indebido y el tráfico ilegal de drogas, que recuerda cada 26 de junio. Fue en la Semana Social, que organiza la Iglesia Católica anualmente, en Mar del Plata.“Nuestra pastoral debe ser de brazos y corazones abiertos frente a una sociedad que muchas veces se encierra por miedos y prejuicios”, expresó el religioso y advirtió: “”Ninguna vida es desechable”.
Sobre la tarea que encara definió: “salimos al encuentro de tantos niños y jóvenes que están sumergidos en el drama de las drogas, especialmente aquellos que están inmersos en contextos de pobreza y exclusión ya que son los más vulnerables”.
Cuentan los feligreses, que lo ven recorrer esquinas y pasillos de las barriadas, que cuando encuentra a un joven “porreando” le pide que “lo apague” para charlar un rato y lo acompaña. “Por lo menos es uno menos que fuma; así se empieza”, lo escucharon decir

-Padre Jorge ¿cómo describe la situación de la droga en la zona norte?
-A diferencia de otros barrios, en la zona norte todavía no hubo un ingreso masivo del “paco”. Esto no nos tiene que conformar sino alertar para trabajar preventivamente sobre un drama que ya otras barriadas de zona sur están sufriendo.
-¿Son realidades sociales diferentes?
-No es porque la realidad social sea muy diferente entre el norte y el sur. Es porque hubo una firmeza mayor –esto es terrible decirlo así, reconozco- de los que venden: los “narcos”, los “transas”. Como el paco compite con la marihuana y la cocaína, quieren seguir vendiendo estas drogas, no el paco; por eso no ingresa en nuestras barriadas. Además, como se sabe que una persona que consume paco en poco tiempo muere, visto desde el narco se trata de un “cliente” que dura poco.
-Una razón de mercado…
-Hay una lucha de muchísimo dinero detrás de esto, claro. Por supuesto que ningún narcotraficante vive en las villas o barrios del conurbano, pero sí es verdad que se enriquecen con los que venden para ellos, los pequeños “transas” de los barrios. Muchas veces son gente necesitada que no consigue trabajo y termina haciendo esto y son los que después van presos, porque siempre el hilo se corta por lo más delgado. Por eso encontramos transas presos, y uno se pregunta ¿Los grandes narcotraficantes dónde están? Bueno, seguirán disfrutando de las playas de Miami (lo dice fastidiado)
-¿Cómo define la adicción a las drogas?
-Es una enfermedad bio, psico, social y espiritual. Biológica porque produce daños físicos. Tiene que ver con lo social porque lo que viven muchos adolescentes y jóvenes, es un sinsentido en su existencia, no encuentran proyecto de futuro; y porque la responsabilidad es de toda la sociedad. Hay que trabajar fundamentalmente la cuestión educativa. Si llegamos tarde con la educación hay que trabajar lo preventivo; cuando llegamos tarde con prevención terminamos trabajando lo asistencial.
-La policía explica ciertos hechos deinseguridad culpando a las drogas…
-La droga banca la violencia, esto es real, pero es claro que no hay que poner de la mano droga e inseguridad. Es verdad que la droga potencia un acto delictivo. La mayoría de los jóvenes que delinquen lo hacen ya drogados o después se drogan para tratar de soportar el grado de frustración y tristeza por el acto cometido. La droga y la violencia están emparentadas, pero no vayamos a creer que cualquier joven adicto es un delincuente porque esto no es así, es simplificar la realidad, es un tema complejo, hay un montón de pibes que consumenque son enfermos, no delincuentes.
-Un adicto, sobre todoen la calle, genera miedo ¿Cuál debe ser la actitud?
-Necesitamos una profunda conversión de corazones. Tenemos que tener claro que la otra persona es mi hermano, y es un hermano tirado al borde del camino, enfermo, discriminado, y está sufriendo mucho. Cualquiera de nosotros, si tiene al lado alguien que está sufriendo, sus actitudes son distintas. Uno no puede dejar de enternecerse, de dar una mano a alguien que está sufriendo. Lo primero que se necesita es dejar de lado prejuicios, miedos, discriminación.
-Mayor compromiso con el prójimo…
-Por supuesto que son buenas las actitudes personales, pero no nos podemos quedar en la buena voluntad. Necesitamos un trabajo más organizado y por eso es fundamental la organización de redes barriales donde, desde distintos ámbitos, se pueda encarar la misma problemática. Es fundamental en esta realidad tan problemática y tan diversa el trabajar de modo institucional y en redes.
-¿Por ejemplo?
-Hay una red en la que están la escuela, la sociedad de fomento, la parroquia, el club de fútbol. Sabemos que el mismo chico es abordado algunas horas de su día por la escuela, otras por la parroquia, luego por la sociedad de fomento, entonces podemos trabajar en conjunto con él lo que tiene que ver con un proyecto de vida, con encontrarle sentido a la propia existencia desde cada abordaje
-¿Cómo ve la labor de las comunas y la provincia?
-El Estado lo hace con algunas medidas que va tomando, algunas veces aisladas. Lo que le cuesta es reconocer que hay algunos que ya están trabajando en las bases, junto a la gente. Lo más interesante es que aporten ideas a lo que ya se hace y aporten fondos. A veces vienen con ideas y creen que por ser del Estado son mejores y esto tenemos que trabajarlo juntos y con la gente, no desdeun escritorio.
-¿Hacia el futuro qué es lo estratégico?
-Me parece que tres cosas. La primera no dejar de hablar ni de instalar el tema, eso me parece importante porque quiere decir que lo seguimos reconociendo. La segunda es trabajar en una educación de calidad y en la formación. Y acá me refiero no solamente al trabajo con los chicos y las familias sino con los equipos docentes. Lo tercero es trabajar la asistencia; hay muchos pibes destruidos en sus vidas que requieren un trabajo hoy, porque mañana puede ser tarde.Link Permanente: http://www.sprensalibre.com.ar/index.php?id=2865
Fuente: http://pastoralsocialsi.blogspot.com/2010/07/drogadependencia.html